Al igual que todos los medicamentos, este medicamento puede producir efectos adversos, aunque no todas las personas los sufran.
Los efectos adversos del medicamento son más comunes en personas mayores de 65 años.
La incidencia de efectos adversos de los medicamentos es menor en tratamientos cortos y si la dosis diaria está por debajo de la dosis máxima recomendada.
Las frecuencias se establecen según la siguiente clasificación: muy frecuentes (pueden afectar a más de 1 de cada 10 pacientes); frecuentes (pueden afectar hasta 1 de cada 10 pacientes); poco frecuentes (pueden afectar hasta 1 de cada 100 pacientes); raros (pueden afectar hasta 1 de cada 1000 pacientes); muy raros (hasta 1 de cada 10.000 pacientes); frecuencia desconocida (no se puede estimar a partir de los datos disponibles).
Se han observado los siguientes efectos adversos:
Gastrointestinales :
Los efectos adversos más frecuentes que pueden ocurrir con este medicamento son los gastrointestinales: úlceras pépticas, hemorragias digestivas, perforaciones (en algunos casos mortales), especialmente en los pacientes de edad avanzada. También se han observado náuseas, vómitos, diarrea, flatulencia, estreñimiento, ardor de estómago, dolor abdominal, sangre en heces, aftas bucales, empeoramiento de colitis ulcerosa y enfermedad de Crohn (enfermedad crónica en la que el sistema inmune ataca el intestino provocando inflamación que produce generalmente diarrea con fiebre). Menos frecuentemente se ha observado la aparición de gastritis. Otros trastornos gastrointestinales, tales como alteraciones en la digestión, dolor abdominal, náuseas son poco frecuentes, y raramente se ha observado diarrea, vómitos, flatulencia y estreñimiento. Muy raros: úlceras gastrointestinales, pancreatitis. Si usted tiene dolores graves en la parte superior del estómago, vomita sangre, tiene sangre en heces o heces de color oscuro, debe dejar de tomar este medicamento e informe a su médico inmediatamente.
Cardiovasculares
Puede asociarse con un moderado aumento de riesgo de sufrir un ataque cardiaco (“infarto de miocardio”) o cerebral.
También se han observado edema (retención de líquidos), hipertensión arterial, e insuficiencia cardiaca (frecuencia no conocida) en asociación con tratamientos con este medicamento.
Sangre:
Muy raramente se han observado alteraciones en las células de la sangre. Los primeros síntomas pueden ser: fiebre, dolor de garganta, úlceras en la boca, síntomas similares a los de la gripe, cansancio excesivo, hemorragias nasales y de la piel. Muy raros: prolongación del tiempo de sangrado.
Piel y reacciones alérgicas :
Frecuentes. Erupción en la piel. Poco frecuentes: enrojecimiento de la piel, picor o hinchazón de la piel, púrpura (manchas violáceas de la piel). Frecuencia no conocida: Erupción generalizada roja escamosa, con bultos debajo de la piel y ampollas localizados principalmente en los pliegues cutáneos, el tronco y las extremidades superiores, que se acompaña de fiebre al inicio del tratamiento (pustulosis exantemática generalizada aguda). Deje de tomar este medicamento si presenta estos síntomas y solicite atención médica de inmediato. Ver también la sección 2. La piel se vuelve sensible a la luz.
Se puede producir una reacción cutánea grave conocida como síndrome DRESS. Los síntomas del síndrome DRESS incluyen: erupción cutánea, inflamación de los ganglios linfáticos y eosinófilos elevados (un tipo de glóbulos blancos).
Excepcionalmente pueden aparecer infecciones cutáneas graves y complicaciones durante la varicela. Reacciones alérgicas graves que pueden manifestarse con náuseas, vómitos, hinchazón de la cara, lengua y garganta, dificultad respiratoria, asma, palpitaciones, hipotensión o shock.
Los medicamentos como Dolorac Pediátrico pueden asociarse, en muy raras ocasiones a reacciones ampollosas muy graves como el Síndrome de Stevens Johnson y la Necrólisis Epidérmica Tóxica.
Renales:
Este medicamento debe utilizarse con precaución en enfermos renales, especialmente si se utiliza junto con medicamentos diuréticos. Puede producirse retención de líquidos y deterioro de la función renal. En estos pacientes, la dosis de ibuprofeno debe ser lo más baja posible.
Se debe tener precaución en no administrarlo a pacientes deshidratados ya que puede desarrollarse insuficiencia renal.
Hepáticos:
Puede asociarse, en raras ocasiones a lesiones hepáticas. Otros efectos adversos raros son hepatitis (inflamación del hígado) e ictericia (coloración amarilla de la piel y ojos). Frecuencia desconocida: insuficiencia hepática.
Sistema Nervioso Central:
Frecuentes: fatiga o somnolencia, dolor de cabeza y mareos o sensación de inestabilidad. Raros: parestesia (sensación de adormecimiento, hormigueo, más frecuente en manos, pies, brazos y piernas).
Muy raro: meningitis aséptica (inflamación de las meningues que son las membranas que protegen el cerebro y la médula espinal, no causada por bacterias), en la mayor parte de los casos en pacientes con alguna enfermedad autoinmunitaria (como lupus eritematoso sistémico y enfermedad mixta del tejido conectivo) lo que suponía un factor de riesgo. Los síntomas observados fueron dolor de cabeza, náuseas, vómitos, fiebre, rigidez de cuello o desorientación.
Psiquiátricos:
Poco frecuentes: insomnio, ansiedad, inquietud. Raros: desorientación o confusión, nerviosismo, irritabilidad, depresión.
Auditivos:
Frecuentes: vértigo. Poco frecuentes: zumbidos o pitidos en los oídos. Raros: trastornos auditivos.
Oculares:
Poco frecuentes: alteraciones de la visión. Raros: visión anormal o borrosa.
Generales:
Agravación de las inflamaciones durante procesos infecciosos.
Hasta la fecha no se han comunicado reacciones alérgicas graves con Ibuprofeno, aunque no pueden descartarse. Las manifestaciones de este tipo de reacciones podrían ser fiebre, erupción en la piel, dolor abdominal, dolor de cabeza intenso y persistente, náuseas, vómitos, hinchazón de la cara, lengua y garganta, dificultad respiratoria, asma, palpitaciones, hipotensión (presión sanguínea más baja de lo usual) o shock.
Si aparece alguno de los efectos adversos citados a continuación, interrumpa el tratamiento y acuda de inmediato a su médico:
– Reacciones alérgicas tales como erupciones en la piel, hinchazón de la cara, pitos en el pecho o dificultad respiratoria.
– Vómitos de sangre, o de aspecto similar a los posos de café.
– Sangre en las heces o diarrea con sangre.
– Dolor intenso de estómago.
– Ampollas o descamación importante en la piel.
– Dolor de cabeza intenso o persistente.
– Coloración amarilla de la piel (ictericia).
– Signos de hipersensibilidad (alergia) grave (ver más arriba en este mismo apartado).
– Hinchazón de las extremidades o acumulación de líquido en los brazos o piernas.
Comunicación de efectos adversos
Si experimenta cualquier tipo de efecto adverso, consulte con su médico o farmacéutico, incluso si se trata de efectos adversos que no aparecen en este prospecto. También puede comunicarlos directamente a través del Sistema Español de Farmacovigilancia de Medicamentos de uso humano: www.notificaram.es. Mediante la comunicación de efectos adversos puede contribuir a proporcionar más información sobre la seguridad de este medicamento.