No tome Lebersal
- Si es alérgico al bicarbonato sódico, al fosfato disódico anhidro, al sulfato sódico anhidro, al sulfato magnésico anhidro o a alguno de los demás componentes de este medicamento (incluidos en la sección 6).
- Si padece desequilibrio electrolítico (alteración del contenido de agua o electrolitos), hipernatremia (nivel elevado de sodio en sangre) o procesos diarreicos.
Advertencias y precauciones
Consulte a su médico o farmacéutico antes de empezar a tomar Lebersal:
- Si padece insuficiencia cardiaca.
- Si padece insuficiencia renal (enfermedad del riñón).
- Si es propenso a la retención de agua (edemas).
- Si está sometido a dietas hiponatrémicas (bajas en sal).
- Si padece de hipertensión.
- Durante el tratamiento con diuréticos (medicamentos que aumentan la eliminación de orina).
- Si está embarazada o en período de lactancia.
Toma de Lebersal con otros medicamentos:
Informe a su médico o farmacéutico si está tomando, ha tomado recientemente o pudiera tener que tomar cualquier otro medicamento.
No debe suministarse conjuntamente con otros medicamentos administrados por vía oral ya que puede afectar su absorción, como es el caso de tetraciclinas, ketoconazol, cimetidina, ranitidina, famotidina, mecamilamina, metenamina, bifosfonatos, digoxina, indometacina, sales de hierro, litio, salicilatos y naproxeno.
Por contener bicarbonato sódico y sulfato de magnesio puede disminuir la eliminación en orina de anfetaminas y quinidina.
Las sales de aluminio, calcio o magnesio, podrían disminuir la absorción de Lebersal por su contenido en fosfato. Por otro lado, la vitamina D aumenta la absorción de fosfato, de manera que podría provocar hiperfosfatemia (exceso de fosfato en sangre).
La administración con medicamentos que afectan los electrolitos séricos (minerales que se encuentran en sangre) como diuréticos, bloqueadores de los canales del calcio, tratamiento con litio, puede llevar a niveles elevados en sangre de fosfato (hiperfosfatemia), de sodio (hipernatremia), magnesio (hipermagnesemia) y niveles bajos de calcio (hipocalcemia).
Además, si se toma junto con suplementos de calcio puede aumentarse el riesgo de calcificación ectópica (depósitos de sales de calcio en tejidos extraesqueléticos).
En cualquier caso, si fuese necesario tomar estos medicamentos se separarían las tomas como mínimo dos horas.
Toma de Lebersal con alimentos y bebidas
No tomar con el estómago demasiado lleno de comida o bebida, ya que puede causar un aumento de la producción de dióxido de carbono lo que originaría una distensión gástrica y en raras ocasiones puede perforar las paredes del estómago.
Embarazo, lactancia y fertilidad
Si está embarazada o en periodo de lactancia, cree que podría estar embarazada o tiene intención de quedarse embarazada, consulte a su médico o farmacéutico antes de utilizar este medicamento.
No se recomienda su uso durante el embarazo. La presencia de bicarbonato sódico en Lebersal puede inducir alcalosis metabólica (trastorno del equilibrio de agua y sales minerales en sangre), retención de agua y aumento de peso, tanto en la madre como en el feto.
No se recomienda su toma durante la lactancia, pues se desconoce si Lebersal se excreta en la leche materna.
Conducción y uso de máquinas
No se han descrito efectos del Lebersal sobre la capacidad de conducir vehículos o manejar maquinaria.
Lebersal contiene sodio
Este medicamento contiene 470 mg de sodio (componente principal de la sal de mesa/para cocinar) en 2,5 gramos. Esto equivale al 24% de la ingesta diaria máxima de sodio recomendada para un adulto.
Consulte con su médico o farmacéutico si necesita una cucharadita o más diaria por un período prolongado especialmente si le han recomendado una dieta baja en sal (sodio).