Básico
El trastorno límite de la personalidad (TLP) es uno de los "trastornos de la personalidad emocionalmente inestables" que suelen aparecer en la adolescencia o en la juventud. Los expertos estiman que alrededor del 6 % de los jóvenes, es decir, entre el 1 y el 2 % de la población total de Alemania, padece un trastorno límite de la personalidad.
En el pasado, se suponía que las mujeres jóvenes se veían afectadas con mayor frecuencia por el trastorno límite de la personalidad. Sin embargo, según los últimos estudios, cabe suponer que la distribución por sexos está bastante equilibrada. Alrededor del 70 % de los pacientes en terapia son mujeres; los enfermos varones pueden ser más propensos a la violencia, razón por la cual, según los estudios, es más probable que estén en instituciones de justicia juvenil que en instituciones terapéuticas.
Los pacientes limítrofes suelen sufrir graves cambios de humor y tormentas emocionales. Para escapar de esta tensión durante un tiempo, muchos enfermos muestran formas de autodestrucción, como autolesiones, consumo de drogas, trastornos alimentarios o práctica de deportes de alto riesgo. En muchos pacientes también se observa un fuerte odio a sí mismo, convirtiendo el propio cuerpo en un objeto de rechazo.
Como la intensidad de estas emociones puede ser a veces muy fuerte, muchos enfermos pierden la sensación de su propio cuerpo al situarse a su lado y dejar de percibir la realidad. Los médicos llaman a esta condición "disociación".
Los pacientes borderline también sufren por no poder controlar sus propios impulsos. Hasta las cosas más pequeñas pueden alterarlas. Este es el caso, sobre todo, cuando se les impide llevar a cabo sus impulsos. Este comportamiento puede hacer que entren fácilmente en conflicto con su entorno y con sus congéneres. Pueden tener una imagen de sí mismos inestable que puede tambalearse fácilmente. Por lo tanto, puede ser cada vez más difícil para ellos perseguir objetivos, ya que sus planes pueden cambiar más rápidamente.
Las personas o las circunstancias pueden ser idealizadas en un momento y fuertemente devaluadas en una ligera decepción. Muchos enfermos pueden tener dificultades para completar la formación profesional.
Por término medio, la gravedad del trastorno disminuye a los cuarenta años y la intensidad de las tormentas emocionales se reduce. El borderline suele aparecer junto con otras enfermedades. Así, muchos pacientes también sufren depresión, trastornos de pánico, trastorno de estrés postraumático y alcoholismo en cierta medida.
Poner en práctica la creatividad:
Como las personalidades límite tienen una vida emocional intensa, a veces pueden ponerla en práctica de forma creativa. Por ello, también pueden ser músicos, actores o pintores con talento.